En esta clase de religión titulada “La vocación del amor”, orientada a cuarto grado, el objetivo es que el estudiante aprenda sobre la vocación del amor, que significa que Dios nos llama a vivir con amor, ayudando y cuidando a los demás. Al final del texto hallará el botón descargar PDF, donde, además de la clase, encontrará actividades para evaluar lo aprendido.
LA VOCACIÓN DEL AMOR
¿Alguna vez te han dicho que tienes un talento o algo que hacer que es especial para ti? Eso se llama una vocación. La vocación es el llamado de Dios para hacer algo con nuestra vida. Y una de las vocaciones más importantes que todos recibimos es la vocación del amor. Dios nos llama a amar a los demás como Él nos ama.
En la Biblia, encontramos muchos ejemplos de personas que vivieron su vocación del amor. Vamos a conocer a algunos de ellos:
El mandamiento del amor
Jesús nos enseñó que el mandamiento más importante es “amar a Dios sobre todas las cosas” y “amar al prójimo como a ti mismo”. Este es el corazón de la vocación del amor. Jesús nos invita a vivir con amor en todo lo que hacemos, amando tanto a Dios como a los demás.
La parábola del buen samaritano
Jesús cuenta la historia de un hombre que, al ver a alguien herido en el camino, no duda en ayudarlo. Aunque otros lo ignoraron, el buen samaritano mostró compasión y amor, cuidando de la persona necesitada. Este ejemplo nos enseña que nuestra vocación del amor también incluye ayudar a los demás, especialmente a los que más lo necesitan.
Jesús y sus discípulos
Jesús les dijo a sus discípulos: “Este es mi mandamiento: que se amen unos a otros, como yo los he amado.” Jesús nos dio el ejemplo supremo de amor al dar su vida por nosotros. Este sacrificio nos muestra lo grande que es el amor verdadero, y cómo debemos estar dispuestos a amar de la misma manera.
La vocación del amor no es solo para unas pocas personas; Dios nos llama a todos a vivir amando a los demás. Puedes amar a tu familia, a tus amigos, y hasta a aquellos que no conoces. Amar significa ser amables, ayudar, perdonar y hacer el bien sin esperar nada a cambio. Así, cada vez que haces algo bueno por los demás, estás viviendo la vocación del amor.
Fuentes:
La Santa Biblia: Mateo 22:37-39. Lucas 10:25-37. Juan 15:12-13
