La presente clase de religión titulada “Importancia de la Oración”, orientada a tercer grado, tiene como objetivo que el estudiante comprenda qué es la oración, por qué es importante, y cómo puede ayudarnos a estar más cerca de Dios y de los demás. Al final del texto encontrará el botón descargar PDF, donde además de la clase incluye actividades para evaluar lo aprendido.
IMPORTANCIA DE LA ORACIÓN
La oración
La oración es una forma de hablar con Dios de corazón, como lo hicieron los israelitas y muchos personajes importantes de la Biblia. Ellos confiaban en Dios a través de la oración, especialmente en momentos difíciles o cuando querían agradecerle por sus bendiciones. La oración es un momento especial porque:
- Fortalece nuestra relación con Dios.
- Nos ayuda a confiar en que Dios siempre está con nosotros.
- Es una forma de encontrar paz y consuelo.
- Nos enseña a dar gracias y pedir por los demás.
Podemos orar en cualquier lugar y en cualquier momento.
Daniel en el foso de los leones
Hace mucho tiempo, había un hombre llamado Daniel que amaba a Dios con todo su corazón. Daniel vivía en Babilonia y trabajaba para el rey Darío, quien confiaba mucho en él porque siempre hacía las cosas bien. Pero algunas personas que trabajaban con Daniel estaban celosas de él. Querían hacerlo quedar mal delante del rey. Entonces, se les ocurrió un plan. Convencieron al rey de que hiciera una ley muy extraña: “Durante 30 días, nadie puede orar a ningún dios. ¡Solo al rey!” Si alguien desobedecía, sería arrojado al foso de los leones.
Daniel sabía que esa ley era injusta, porque él amaba a Dios y sabía que solo debía orar a Él. Así que, como siempre, Daniel subió a su cuarto, abrió la ventana y oró mirando hacia Jerusalén. No le importaba lo que dijeran los demás, porque sabía que orar era la mejor forma de estar cerca de Dios.
Los hombres que lo envidiaban vieron a Daniel orando y corrieron a decírselo al rey. Aunque al rey Darío le dolió mucho castigar a Daniel, tuvo que cumplir con la ley. Así que ordenó que Daniel fuera arrojado al foso de los leones. Esa noche, el rey Darío no pudo dormir. Estaba preocupado por Daniel, porque sabía que era un hombre bueno y que no había hecho nada malo.
A la mañana siguiente, el rey corrió al foso y gritó: “¡Daniel, el Dios al que sirves, ¿te ha salvado?!”
Daniel respondió desde el foso: “¡Sí, mi rey! Dios envió a un ángel para cerrar la boca de los leones. No me han hecho daño porque Dios sabe que soy inocente.”
El rey Darío estaba tan feliz que ordenó sacar a Daniel del foso. Después, el rey dijo a todo su reino: “El Dios de Daniel es el Dios verdadero. ¡Él salva y protege a quienes confían en Él!”
La historia de Daniel nos enseña que orar es muy importante. Daniel confió en Dios incluso cuando estaba en peligro, y Dios lo protegió. Esto nos recuerda que siempre podemos hablar con Dios, especialmente en momentos difíciles.

Fuentes:
- Biblia: Éxodo 14:13-14, Daniel 6:10-23, 1 Samuel 1:10-20, Lucas 11:1-4, Salmo 145:18. Jeremías 33:3
- Catecismo de la Iglesia Católica: Números 2565-2583 (La oración en la vida de los creyentes).