En esta clase de religión titulada “Jesús el salvador prometido”, orientada a cuarto grado, el objetivo es que el estudiante conozca que Jesús es el Salvador prometido por Dios y comprenda su vocación de amor y servicio. Al final del texto hallará el botón descargar PDF, donde, además de la clase, encontrará actividades para evaluar lo aprendido.
JESÚS, EL SALVADOR PROMETIDO
Desde hace mucho tiempo, el pueblo de Israel esperaba un Salvador. Los profetas hablaban de alguien especial que vendría enviado por Dios para traer paz, justicia y amor. Ese Salvador sería el Mesías, el Hijo de Dios, y su misión sería ayudar a todos a acercarse a Dios.
Cuando llegó el momento, Dios cumplió su promesa. Jesús nació en Belén, en una familia sencilla y llena de fe. Desde pequeño, Jesús mostró un gran amor por Dios y por los demás. Fue obediente a sus padres y creció en sabiduría y gracia. Él sabía que había sido enviado con una vocación muy especial: salvar a la humanidad y mostrar el camino al Reino de Dios.
La vocación de Jesús fue servir con amor, enseñar la verdad, curar a los enfermos y perdonar a los pecadores. Nunca buscó ser importante ni tener riquezas. Su vida fue un ejemplo de entrega total a la voluntad de Dios Padre.
Cuando Jesús comenzó su vida pública, fue bautizado por Juan el Bautista en el río Jordán. Allí, el Espíritu Santo bajó sobre Él, y se escuchó la voz del Padre que decía: “Este es mi Hijo amado, en quien me complazco” (Mateo 3,17). Fue el comienzo de su misión como Salvador.
Muchos en Israel reconocieron a Jesús como el Salvador y lo seguían por sus enseñanzas y milagros. Sin embargo, otros no lo aceptaron porque esperaban un rey poderoso, no a un hombre humilde que hablaba de amor y perdón. Aun así, Jesús cumplió la promesa de Dios: dio su vida por nosotros en la cruz y resucitó al tercer día. Así nos abrió el camino al cielo.
Jesús nos salvó con su amor, su vida y su sacrificio en la cruz. Pero su historia no termina allí: al resucitar, nos mostró que el amor de Dios es más fuerte que la muerte. Él vive hoy y quiere que también nosotros lo recibamos en nuestro corazón, sigamos su ejemplo y seamos buenos con los demás.

Fuentes: Biblia de América: Evangelios: Lucas 1–2; 4: 16 - 21 Mateo 1–21; 3: 13 -17, Isaías 7,14
Catecismo de la Iglesia Católica, puntos 422–429 Documento de Aparecida (2007), Conferencia Episcopal Latinoamericana
Youcat para niños, Ediciones Encuentro (2019)